Osteopatía para cólicos del lactante
Los cólicos del lactante son episodios de llanto continuo en el bebé y se caracterizan porque no se calman con nada. Suelen durar más de 30 minutos, el llanto es elevado y desconsolado. Por lo general, se dan cuando el bebé tiene un mes de vida y se pueden alargar hasta los 3-4 meses (en ocasiones hasta los 6 meses).
Normalmente se da hacia las últimas horas del día, alrededor de las 20 horas y se pueden alargar toda la noche. Los síntomas del cólico del lactante suelen ser, entre otros:
- El bebé está inquieto.
- El bebé no para se moverse, cambiando de posición continuamente en busca del alivio del dolor.
- La tez de la cara del bebé se pone roja.
- El vientre del bebé se encuentra hinchado.
En cuanto a la valoración que realizamos en nuestra Clínica de Fisioterapia y Osteopatía, lo primero es preguntar a la madre y al padre del bebé, si el parto ha sido natural o por cesárea y si se ha empleado instrumental durante este. ¿Y porqué es importante esto? Es fundamental conocer estos datos ya que determinaremos la presión intracraneal a la que se ha sometido al bebé. Otros aspectos importantes van a ser si ha sido un parto complicado o muy largo ya que el bebé puede tener mucha tensión dural, que le obligue a colocarse en posiciones asimétricas que dificulten las digestiones.
La Osteopatía ayuda en estos casos corrigiendo las cadenas musculares que causan esas posturas mediante técnicas que se aplican suavemente en el cráneo, de esta manera movilizamos esa tensión dural, para mejorar las digestiones del bebé. Otras técnicas que se usan con frecuencia son las aplicadas a nivel visceral, con ellas ayudamos a movilizar las heces y los posibles gases que se hayan acumulado tras las tomas.
Otra del las preguntas que solemos es el tipo de alimentación que tiene el bebé; si es alimentado por lactancia materna habrá que vigilar el agarre al pezón, ya que si este es malo puede generar cólicos y regurgitaciones. Si por el contrario la alimentación es mediante leche de fórmula, lo primero será descartar una intolerancia a la proteína de la leche, y valorar cambiar la alimentación a leche hidrolizada o parcialmente hidrolizada. En ambos casos, la inmadurez del intestino del bebé puede estar generando cólicos.
En Meraki Salud Fisioterapia podemos ayudarte a identificar cual es el tipo de cólico que tiene tu bebé y cómo aliviar sus síntomas. Te enseñaremos además a realizarle un masaje para relajar esa tensión intestinal y expulsar los gases que dificultan la digestión del bebé.
No lo dudes más y pide una cita con nosotras, tu bebé y tú agradecerán.
Artículo escrito por:
Tamara Lorenzo Salgado
Colegiada 4008